¿cómo afecta el frío al ganado?

¿Cómo afecta el frío al ganado?

Los animales como los seres humanos pasan por el mismo proceso de adaptación con los cambios de temperatura. Si vamos a hablar sobre cómo afecta el frío al ganado tenemos que tener en cuenta que existen cinco variables meteorológicas que determinan el confort y ambiente térmico del animal:

  1. La temperatura ambiental
  2. La radiación solar
  3. La velocidad del viento
  4. Las precipitaciones
  5. La humedad relativa

En este artículo nos centraremos en los temporales de frío, una variación que implica a los 5 factores anteriormente mencionados. 

Partimos de la base, de que el clima afecta al ganado lo que implica cambios en su comportamiento, metabolismo y energía. Esto conlleva directamente a que puedan tener cambios en su alimentación, debido a estos cambios climáticos ya que los animales se estresan y comen menos (están tensos) o más (para acumular) lo que afecta directamente a su rendimiento. Si no se toman medidas a tiempo para disminuir el estrés de los animales debido al clima, los daños siguen creciendo en el tiempo y puede llevar directamente a la muerte del animal.

Cuando hablamos de cómo afecta el frío al ganado debemos de saber que a nivel mundial los temporales de frío son más largos que los temporales de calor, por lo que se convierten en el gran desafío para el animal y a su vez para el productor. En este sentido, hay otras situaciones que se desconocen. Por ello, debemos preguntarnos ¿cómo afecta el frío al ganado? ¿qué impacto tiene el frío en nuestro ganado? A continuación veremos algunos de los factores que afectan directamente al bienestar y producción del animal.

Factores a tener en cuenta con los temporales de frío

factores a tener en cuenta con los temporales de frío

Aunque resulte una obviedad, lo primero que debemos tener en cuenta es que los animales, necesitan mantener su temperatura corporal, por ejemplo: 

  • En el caso del ganado bovino, la temperatura corporal debe de estar entre 37,5 – 39,5ºC
  • En el caso del ganado equino, debe estar entre los 37º y 38ºC aunque puede variar 3º dependiendo de los factores ambientales.
  • En el caso del ganado porcino, normalmente se encuentra entre los 38 y 38,5ºC.
  • En el caso de las aves como el pollo/gallina, su temperatura corporal oscila entre los 40,6 y 41,9ºC.

Estas temperaturas son las idóneas en la que se optimizan los procesos metabólicos (reacciones bioquímicas a nivel celular) y que no debemos de permitir que un temporal de frío las haga disminuir.

La alimentación del ganado

Con la llegada del invierno aumenta el consumo de alimento en los animales, esto se debe a que necesitan más nutrientes para generar más calor y mantener su propia temperatura corporal. Aunque coman más, no producen una cantidad mayor como se podría esperar. Pero al ingerir una cantidad mayor de alimento producen un depósito de grasa corporal subcutánea, lo que mejora su capacidad de aislamiento.

Por otro lado, también aumenta la tasa de pasaje del alimento (velocidad de paso en el tracto digestivo) lo que conlleva a una peor digestión. Cierto es que si el ganado se ha adaptado correctamente al clima invernal tiene una digestión más eficiente que aquel que no ha tenido la oportunidad de adaptarse. 

El barro

el barro

Hablar de cómo afecta el frío al ganado pasa también por cómo el barro afecta al ganado. Cuando llegan los temporales de invierno, el efecto de las precipitaciones en nuestro ganado cobra mayor significado. Como por ejemplo con la lluvia, los animales adoptan una posición diferente a la habitual, y la lluvia puede crear barro en algunas zonas del terreno.

Los animales necesitan descansar en lugares secos y en estos temporales según la extensión del terreno y el nivel de intensidad del temporal, puede que el animal opte por no moverse si es una lluvia leve o iré a resguardarse a su establo. 

En el caso de que acaben descansando en el barro, este puede quedar adherido a su pelaje. Cuando esto ocurre el animal seca ese barro con su propio calor corporal lo que implica que destine parte de la energía obtenida de los nutrientes para este propósito.

En este sentido, el animal cuenta con menos energía para la producción, además la temperatura corporal es más baja. Estas temperaturas suelen medirse como temperaturas rectales, timpánicas o vaginales. 

El viento

En muchas ocasiones al frío se le suma el viento, y esto hace que el animal pierda el calor más rápido que ha estado generando debido al frío y entra en desequilibrio térmico (hipotermia), lo que implica un descenso de temperatura timpánica.

El viento puede ser un factor de mayor riesgo cuando el animal está mojado y con el barro adherido a su pelaje.  Si a todo esto le añadimos que además el animal está falto de nutrientes, la caída de temperatura corporal será aún mayor.

En definitiva, para saber cómo afecta el frío al ganado hemos visto que aquellos animales que estén expuestos a la lluvia, al viento y al barro estarán más afectados que aquellos que se encuentren solo con lluvia pero protegidos del viento y el barro.

¿Qué medidas podemos tomar para ayudar a nuestro ganado?

A continuación, veremos algunas de las medidas por las que podemos apostar para ayudar a nuestro ganado en temporales de frío:

  • Optar por un lugar seco: Es la medida más natural, proveer a nuestro ganado un lugar seco en el que pueda descansar y echarse.  En este caso podemos aprovechar un corral o una pendiente natural a fin de que no estén sumidos en el barro. Además debemos contar con un buen sistema de drenaje para evitar así la formación de charcos. Se recomienda que además las instalaciones estén en unas óptimas condiciones higiénicas, para prevenir las enfermedades producidas por hongos o humedad.
  • Cortinas cortavientos: Esta es una solución rápida y sencilla, se trata de optar por poner cortinas cortavientos (naturales o artificiales). En este sentido, podemos aprovechar los bosquetes naturales o crear directamente una instalación con cortavientos. Si optamos por la instalación con cortavientos, debemos pensar si estos van a ser fijos o no, ya que en el caso de que sean fijos puede llegar a ser un problema en verano.

Desde Zotal esperamos haber contribuido a la búsqueda de información de cómo afecta el frío al ganado. Si quieres mantenerte informado de nuestras últimas noticias o hacernos llegar algún comentario síguenos en nuestras redes sociales, Facebook, Twitter o LinkedIn.

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